lunes, 14 de abril de 2008

doctrina


Alegorías y cabezas de elefantes,
una memoria sin precedente y
 las doctrinas de un lenguaje.

Donde la boca deja de ser un parte del cuerpo,
 es el umbral de un portal,
mentiras, verdades, sueños,
deseos entre infinitos de raquídeos verbos.

Un titular que no para de hablar ,
imponer su modo.
Su carácter; exterminador de toda templanza..

Puede ser un padre,
un hombre cualquiera.
¿Acaso para educar sobre la lengua,
 un ente, tiene que matar el origen, a la madre?
¿ Esconderla, hacer invisible, sepultarla, desconocerla?

. Una mesa donde se educa comiendo,
el sobremesa, no hablar con la boca llena,
tenedores, copas, sal y pimienta…
Siéntate bien,
No se habla de política, ni de religión o futbol.
Usa la servilleta, la boca esta asquerosa


Silencio, el cabiz bajo y
la boca perturbada, atiborrada por la censura.
Diga solo que lo sea pertinente en la mesa…
 Nos convertimos en traductores de su fosa mental...

Doctrina escolar universitaria marital demencial paterna /matriarcal ,
ocultos bajos los malos hábitos de la mesa enjuiciadora.
Donde aun se pegan los chicles
que de blandos se transforman en duro
al  igual que las paredes del corazón y la razón...

Razón lenguaje, vocales, plural singular
Todos reglamentos atacados por la dislexia,
el olvido de una doctrina.

Si desvanecemos un verbo
y lo  de dejamos dar por entendido,
continuaremos  siendo diccionarios de traducción de conceptos impuestos ...en fin doctrina a los pies perdido bajo la mesa