sábado, 10 de enero de 2015

Experiencia del hogar de niños...

La confusión de la lengua entre Freud y Ferenczi
 “ Mute”
            El silencio en forma física no existe, es ficticio aun cuando una persona se encuentra totalmente aislada esta va a poder escuchar el sonido de la sangre corriendo por las venas y los profundos latidos de su corazón.
            ¿Pero acaso necesitamos oír de forma explicita y frecuencial un grito? Para saber que es un grito  o puede ser que viéramos  el montaje de imágenes de una mujer gritando, pero el audio totalmente denegado ¿qué sucede? Lo escuchamos igual, pero es un sonido construido y continuado por los otros sentidos.
            En primera instancia ese pequeño abusado se quedo sin palabras, ya que el diccionario que él utiliza para comunicarse ha sido apropiado por un ente, ha sido sustraído, es decir, usurpado el diccionario que tenia representaciones de colores e imágenes impresionistas y ha sido intercambiado por un vocablo ajeno, desde el deseo erótico del adulto, a palabras que esbozan algunas faltas de ortografías y ausencia de sintaxis.
            Al  niño  es arrebatado su librito, ese que andaba mostrando a todos, de forma exhibidora y orgullosa cuando aprendía o anexaba algo nuevo, por ejemplo cuando aprendió a escribir su nombre y después lo repetía en las paredes o en cuanto soporte el quisiera, haciéndose cargo de su propio aparece en el diccionario.
            Pero el libraco que es impuesto, a doctrinado, no es comprensible (inconmensurable) por el niño, no es capas ni de pronunciar los acentos y menos de comprender la  temporalidad de los verbos… Es un diccionario lleno de verborreas sin espacios.
            El diccionario del niño es ideográfico, hasta icónico y sensitivo.
            Cuando es perpetrado ese librito, él ya no puede usar su vocabulario y tiene que usar un dialecto ajeno a su tiempo.
            Quizás tampoco su madre es capas de reconocerlo, si no logra entender lo que realmente quiere decir su hijo y en omisión lingüística e inconexa con su diccionario, el cual también esta mecanografiado; minoriza la falta de elocuencia (ella escucha lo que quiere escuchar y entiende) y desencadena una incongruencia, traduciéndola a un error del niño
--hijo estas diciendo tonterías –
¿Qué diccionario utiliza ella? ¿Reconoce lo que esta diciendo su hijo? Pero al no lograrlo decodificar bien, no reconoce al niño, es decir lo hace desaparecer… Houdini! Pero este en su ultimo acto se ahogo con sus cadenas.
            Ese otro que podría auxiliar y por el cual se pretende concretar una comunicación es saboteado, por la ruptura de una cadena de confianza cóncava para transformarse en una imagen convexa que implica la gravedad de la sordera y solo refleja el dolor de su hijo y no logra acogerlo.
            El silencio es una mordaza que permite respirar al niño pero lo hace balbucear, ni sus propias palabras son capaces de abarcar su sentir, es decir, él tampoco se reconoce, se despoja del espejo, quedando fuera de el.
            Su otro contenedor (madre) es invalidado y genera su ausencia, por ende ya no hay acuna miento. El diccionario de su madre no sirve ¿con quién se puede comunicar?¿ Con el mismo que le provee el diccionario monocromático?, ya tiene un conversar nefasto y en común hasta algunas jergas. El invasor se apropio y el pequeño necesita comunicarse, pero nuevamente, queda invalidado, es así como se transforma en una especie de lazarillo, un bastón, una muleta al servicio del imperialista que arrasó con su lengua.
            Es por ellos cuando quiere comunicarse con otro, se muestra sumiso, dócil, porque busca una aceptación y una validación de su nueva identidad, no quiere rechazo, es por uno de los motivos que no critica al analista, él sigue  encubriendo al ladrón, porque tiene un poder sobre él y tiene un habla en común.
            Experiencia en el hogar, en particular, nosotras hablamos con un chico llamado Omar, quien nos iba contando su diario vivir, mirándonos a los ojos y en otros momento observando sus laminas de juego, pero en el instante que intentábamos profundizar con algunas preguntas por ejemplo, ¿como fue que llegaste? El cambiaba la dirección de sus ojos hacia la pared y respondía  con un no me acuerdo, un pequeño silencio y seguía jugando con las laminas, pero pese a ese corte el estaba totalmente abierto a hablar, daba la impresión que se sentía cómodo, de que le gustaba que tuviera nuestra atención.

Alrededor del lugar los demás chicos revoloteaban, corrían, jugaban, se les notaba contentos, con nuestra visita, a la cual finalmente concluían diciéndonos, ¿pero ya se van?

......

Lenguaje –– sintaxis
Escribo este apunte con un ojo un tanto tuerto, luego de haber sido  atacado por una pestaña caprichosa, tal situación evoca la segmentación de lo que veo, mi campo visual y por dicho mal ha sido reducido y además me general una cierta incomodidad, pero a la vez esa disección radica en un mejor enfoque.
En relación a las correcciones, con esta visión sin periferia total, me centro un poco en hace énfasis de donde radita tales conceptos como lenguaje, lenguajear y sintaxis, evocando a la vez imágenes del diccionario ( sopena -  Larousse).
Quiero partir desde el lugar del lenguajear, lo tomo desde el biólogo chileno Humberto Maturana ( quien propone el concepto de autopoiesis) él menciona el lenguajear como una danza comunicativa, la cual no es de forma explicita en los fonemas o el copy - page de silabas, si que hace hincapié al lenguaje del hacer, del movimiento espacial. Que al acto del amar en la comunicación esta en la total aceptación del otro, pero eso  no implica alguna cualidad nociva. Lo tomo como la referencia que generamos con nuestra ubicación,  en el donde estamos de pie y si ese niño abusado, que quizás no evoca una palabra explicita, porque se quedo mudo   o utiliza palabras que no son propias de su diccionario ( con carácter de bitácora) son abarcables para su padecer ,entonces se  observa su danzar, quizás otros hablan de conducta con movimiento corporales hasta exagerados ( grotescos), una forma de encriptar, pero si estamos atentos y nos disponemos a escuchar tal vez podamos entender la primera silaba de lo que el niño intenta decir….
La mamá debería ser poliglota o hasta curadora en el arte de lo que va expresando su hijo, pero ella también esta distorsionada  y su danzar es una paso traspuesto, es un paso en falso, (quizás ella quiere ir mas rapidito) e intentar acelerar a su pareja para que siga su ritmo, pero luego viene el ente, la toma de la cintura bien fuerte y la desalinea, ella comienza a pisarse los pies, avanza con una cojera… sordera y ceguera
Y todas estas falencias y omisiones casi sensitivas se trasladan a una falta de construcción de la oratoria, tanto en lo kinésico , habla y escritura, se genera un rompecabezas que esta regado por el suelo… Las palabras están, pero el cordón esta inconexo y la persona que se supone pertinente intenta encajar mal algunas de esas piezas, la madre que tiene intención de ayudar, su accionar no es coherente con su hacer y termina siendo todo un reproche para el pequeño.
Y el abusador, como amo de su feudo toma y vuelve a tomar sin importar si la tierras son capaces de volver a producir una cosecha…
La sintaxis es el ordenamiento de las palabras para que ellas logren tener un significado lógico o para que se logre entender la intencionalidad de lo que se dice, pero principalmente es el orden ante que su significado ( si no seria semántica)
Quiero retomar el tema de es chico moreno de ojos saltones y de cierta locuacidad, pero que cuando se profundiza con preguntas, el ignora con sus ojos.
El intentaba mostrarse  , habla mientras las preguntas fueran superficiales, pero cuando tocábamos el “ tema “ de cómo llegue al aparador, su respuesta era no me acuerdo, no quería que tal hecho hiciera perder nuestra atención y del juego… Pero en cierto grado sabemos que en ese recuerdo puso puntos suspensivos agregados con una interrogante en un lugar donde no evoca palabra, pero nosotras entendíamos porque estamos receptivas. El ya  aprendió de cierta forma a jugar con ese lenguaje.
Otro punto que llama la atención fue cuando se le pregunto por las tareas del colegio ; su cuaderno estaba un tanto escuálido e incompleto, él decía que le daban tareas, pero que las iba haciendo mientras regresaba al hogar, que inclusive en la luz roja, al cruzar el escribía, porque él quería tener tiempo para jugar. Es decir después de todo Omar siente un grado de  conformidad que le otorga el hogar, deseando abrir ese espacio para jugar. Bueno los estudios no interfieren con mi tiempo de juego, porque lo ocupo todo incluso cuando camino. Puede ser una exageración, una, buscar hasta una sobre idealización de capacidades, por ende sus pseudo protectores lo minorizan y vuelven trastocar su decir si versión…..